miércoles, 16 de marzo de 2011

Tenemos más de un mes sin trabajo y ya no sabemos qué hacer, revela a panorama un grupo de despedidos del gobierno del estado.

Por Alberto Mendoza

La situación de los cientos de trabajadores del gobierno del estado que fueron despedidos desde que llegó la nueva administración, están pasando momentos sumamente difíciles, tanto que amenazan con convertirse en un grave problema social.

Algunos de los despedidos que ya se habían acercado a este medio desde el mes de enero, ante el temor que les invadía por los rumores que se dejaron correr desde el mismo 4 de julio, por el riesgo de perder sus empleos.

La gran mayoría de los hoy desempleados atraviesan momentos sumamente difíciles, según revelaron a panorama este grupo de preocupados padres de familia que vieron truncado su proyecto de vida de un plumazo. “Muchos ya tenemos más de un mes sin trabajo, se negaron a darnos una liquidación justa, nos dieron arbitrariamente lo que se les pegó la gana, menos de la mitad de lo que legalmente nos correspondía como liquidación, me dice don Fernando que dijo, tenía más de 20 años trabajando en la administración estatal.

Ocho vacacionistas como irónicamente se bautizaron hicieron bola en el meritito centro de la ciudad junto a la fuente de San Miguel, que sirvió de testigo de esta tragedia. “Ya no sabemos qué hacer, lo poco que me dieron ya se me acabó, y ahora ya no tengo ni para la “papa”, pagué dos mensualidades de la casa, un pago a la tarjeta, dos pagos a la caja de ahorro que me hizo un préstamo, la luz, dos meses de la colegiatura de mis dos chavos, para acabarla de amolar, se fregó la bomba de gasolina de mi nave, le di su gasto a mi señora, y como te digo, ya no tengo ni para la combi, ya no se qué hacer, ya la situación es desesperante. Lo que le di para el gasto a mi mujer estirándolo tal vez le alcance para 15 días, pero, y después, que voy a hacer, no tengo ni la menor idea. Ya busqué chamba en otros lados y no hay nada, no hay nada, no hay nada… pinche gobierno, que poca…

Los demás concurrentes a la mini manifestación en la plancha del zócalo a las 3 de la tarde, se hacía cada vez más tensa, porque están en las mismas condiciones, y seguramente los cientos de despedidos estarán igual, o quizás haya quienes estén peor.

Roberto, otro navegante del barco del desempleo morenovallista, me dice con gran disgusto, como si yo hubiera tenido algo que ver con su desgracia, “nos están orillando a robar, me dice muy angustiado, si a más tardar en un mes no encuentro trabajo, me vale madre, pero yo me chingo lo que esté mal parado, a como están las cosas ya me vale madre todo. Lo que más coraje me da es que el pendejo que me corrió ni es de Puebla, ese güey creo que es chilango, o de Guanajuato, sepa la madre exactamente de donde es, pero ese güey ni conoce Puebla, ese cabrón ahorita está cobrando su quincena, hoy es quincena, que poca madre, luego de tantos años de trabajar una patada como perro y a la calle, que poca madre, ese güey a de cobrar mínimo 35 mil pesos como director de área, más su sobresueldo, mientras yo ya no tengo nada, que poca madre..”

No sé si porque era la hora de la comida, pero la tarde se veía muy triste, como si el sol que nos pegaba de lleno no calentara, como si se estuviera enfriando, el ambiente se sentía muy pesado. No sé que estén pensando quienes hoy dirigen los destinos de Puebla, pero si no hacen algo, como nunca antes, en nuestra ciudad algo va a pasar. No vaya a ser que como respuesta a la angustia de quienes hoy se quedaron sin trabajo, les respondan con violencia oficial.

A punto de despedirme de los angustiados burócratas en el desempleo, uno de ellos me preguntó: ¿creé usted que los que nos corrieron, dormirán tranquilos? El mismo se respondió, yo creo que sí, porque lo que puedo percibir de ellos, de los que hoy están en el gobierno, es que no son personas de buenos sentimientos, es gente mala, eso sí muy religiosa, pero muy mala, son traga santos, caga diablos…


No hay comentarios:

Publicar un comentario