lunes, 24 de septiembre de 2012

SCT los quiere apapachar con un incremento en el precio del pasaje…

Los transportistas gozan de la complacencia y complicidad de las autoridades.
Por chatarra como esta pretenden cobrar 9 pesos


El transporte público en Puebla es una lacra que ha cobrado impunemente muchas vidas inocentes.


Por david lópez

A pesar de que los transportistas nunca han cumplido sus promesas de mejorar el servicio, y que éste es deplorable, las autoridades han anunciado que se incrementará el precio del transporte, probablemente en 8 o  9 pesos para el mes de diciembre próximo.


Unidads sucias y hasta con chinches y piojos
Los permisionarios nunca habían gozado de tantas complacencias y complicidades de parte de las autoridades estatales y municipales. Hoy los chafiretes del transporte público, como nunca antes, se comportan con exagerada prepotencia; hacen lo que se les pega la gana, y para no variar traen las unidades en condiciones patéticas.

Este aspecto es una prueba de la complicidad de las autoridades, ya que no se explica que pasen la revista, cuando las unidades no pasarían ninguna prueba seria, sin contar lo sucias que andan, ¿cuánto pagan para que pasen la revista? Porque nadie creerá que el servicio es  gratis.


Que el gobernador o Bernardo Coutolenc
 responsable de SCT viajen primero en esta
chatarra y luego que piensen en autorizar
cualquier incremento en el precio del pasaje.
Además,  el costo actual del pasaje es de los más caros del país. No hay ninguna justificación para dicho incremento.

Otro problema grave, es que los permisionarios no son supervisados por la SCT en la contratación de choferes, ya que hasta donde pudimos investigar, el único requisito que piden los dueños de los camiones, es el de tener la licencia respectiva; no investigan  antecedentes penales, experiencia, y si son adictos a alguna sustancia tóxica.


Un asco la mayoría de las unidades.
Se ha dado el caso que durante operativos y solamente cuando hay presencia de medios de comunicación, se han sorprendido a choferes bajo los efectos del alcohol, marihuana y otras drogas.

Así se entiende que todos los días los chafiretes circulen las unidades como locos a altas velocidades, se pasan los semáforos en rojo, bajan y suben pasaje en doble y hasta triple fila, cargan combustible con las unidades llenas, lo que ha traído como consecuencia, que diariamente se susciten accidentes graves con  pérdidas de vidas inocentes.

A pesar de que asegura la SCT que la unidad que provoca la muerte de algún ciudadano, la concesión es cancelada, en los hechos esto no sucede, sobre todo en el presente sexenio.

Un burla de la SCT que pretenda permiar a los
permisionarios con este tipo de transporte
Organizaciones sociales se aprestan a manifestarse y buscar la manera de que no se concrete el aumento del pasaje que lesionaría gravemente el presupuesto de las familias que de por sí a consecuencia de la política económica de los últimos gobiernos panistas, ha incrementado la pobreza en nuestro país.

 

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